Sobre Pedro Salinas y su Razón de Amor:
Poeta florecido al verdísimo jardín del sentimiento: ese que se entrega a cualquiera que desee prestarse a sí mismo para dejarse llevar por sus confluidos ríos. Irradia simpleza en la palabra, pero también profundidad, como la brisa del mar que nos mece las aguas. No tiene pretensiones de poeta: canta al amor desde los abriles vistiéndose de beso y abrazo, como Whitman. Su lectura es preferible en el agua y sobre la arena. Leerle es simplemente desnudarle.
-Claudio Troisemme.
"Dame, tu libertad.
No quiero tu fatiga,
no, ni tus hojas secas,
tu sueño, ojos cerrados.
Ven a mí desde ti,
no desde tu cansancio
de ti.
...
Sentirla,
vuelo parado,
igual que en sosegado soto
siente la rama
donde el ave se posa,
el ardor de volar, la lucha terca
contra las dimensiones en azul".
...
La quiero
para soltarla, solamente".
-Pedro Salinas. (Fragmento del poema "Dame, tu libertad").
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POEMAS:
Salinas, Pedro. (1996). Razón de Amor. (7ma Edición) Buenos Aires, Argentina; Editorial Losada.
AQUÍ
Aquí,
en esta
orilla blanca
del
lecho donde duermes,
estoy al
borde mismo
de tu
sueño. Si diera
un paso
más, caería
en sus
ondas, rompiéndolo
como un
cristal. Me sube
el calor
de tu sueño
hasta el
rostro. Tu hálito
te mide
la andadura
del
sojar: va despacio.
Un soplo
alterno, leve,
me
entrega ese tesoro
exactamente:
el ritmo
de tu
vivir soñando.
Miro. Veo
la estofa
de que
está hecho tu sueño.
La
tienes sobre el cuerpo
como
coraza ingrávida.
Te cerca
de respeto.
A tu
virgen te vuelves
toda
entera, desnuda,
cuando
te vas al sueño.
En la
orilla se paran
las
ansias y los besos:
esperan,
ya sin prisa,
a que abriendo
los ojos
renuncies
a tu ser
invulnerable.
Busco
tu
sueño. Con mi alma
doblada
en ti,
las
miradas recorren,
translúcida,
tu carne
y
apartan dulcemente
las
señas corporales
por ver
si hallan detrás
las
formas de tu sueño.
No lo
encuentran. Y entonces
pienso
en tu sueño. Quiero
descifrarlo.
Las cifras
no
sirven, no es secreto.
Es sueño
y no misterio.
Y de
pronto, en el alto
silencio
de la noche,
un soñar
mío empieza
al borde
de tu cuerpo;
en él el
tuyo siento.
Tú
dormida, yo en vela,
hacíamos
lo mismo.
No había
que buscar:
tu sueño
era mi sueño.
Frases sueltas:
a infinita distancia,
pero laten tus pasos
en todas esas vagas
sombras de ruido, tenues,
que en la alta noche estrellan
el azul del silencio".
-Pedro Salinas. (Extraído del poema "Apenas te has marchado").
"Amor es el retrato milagroso
de su término mismo:
es prolongar el hecho mágico
de que uno y uno sean dos, en contra
de la primer condena de la vida".
-Pedro
Salinas. (Extraído del poema "Ya está la ventana abierta").
"¿O tienes junto a ti sólo la música
tan mártir, destrozada
de chocar contra todas las esquinas
del mundo, la que tocan
desesperadamente, sin besar,
espectros, por la radio?".
-Pedro
Salinas. (Extraído del poema "¿Acompañan las almas? ¿Se las
siente?").
"Y lo recibe
tu oído igual que el silencio
que nos llega hasta el alma
sin saber de qué ausencias
de ruidos está hecho".
"pasajero de labios,
huésped
fugaz de los oídos
cuando desde mi alma
lo sientes en la tuya".
-Pedro
Salinas. (Extraído del poema "¿Tú sabes lo que eres de mí?").
"sin manchas ni querencias
de herir, va por el aire.
Pero el aire está lleno
de esperanzas en vuelo, las encuentra
y las traspasa por las alas tiernas".
-Pedro
Salinas. (Extraído del poema "A veces un no niega").
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